Una aproximación a la solución de problemas a través del liderazgo

Sabemos que muchos de los problemas que afectan a las organizaciones pueden abordarse con ajustes de las rutinas básicas, pero los problemas complejos exigen que cuestionemos y a menudo cambiemos nuestras propias creencias y suposiciones profundamente arraigadas.

Nuestra experiencia nos permite asumir desafíos en los múltiples aspectos involucrados en la gestión, desde la generación y análisis de información bajo condiciones de estrés e incertidumbre, a la formación de equipos y la motivación de personas que provienen de distintas generaciones y formación técnico profesional. Incluso con recursos limitados y retomando los esfuerzos luego de conflictos o fracasos.

Hemos desarrollado además la capacidad de instalar estructuras de trabajo que permiten generar y coordinar proyectos complejos, reaccionando oportunamente a diversos tipos de contingencias.

Para lograr nuestro propósito, proponemos una serie de herramientas y metodologías basadas en la experiencia operacional y académica, sumada a una comprensión práctica del liderazgo y la gestión, entendiendo que estas son tareas esencialmente humanas y que se fundamentan en acciones de individuos que buscan lograr un resultado compartido.

Uno de los elementos centrales de esta propuesta es la adopción de la filosofía de mando y liderazgo conocida como "Mando Tipo Misión", cuyo objetivo es proporcionar a los directivos y jefaturas de todos los niveles la flexibilidad necesaria para actuar y reaccionar con rapidez ante situaciones cambiantes, manteniendo al mismo tiempo el control sobre su organización.

En esta línea, ayudamos a las organizaciones a abandonar el liderazgo jerárquico y centralizado, promoviendo el liderazgo distribuido, liderazgo compartido y liderazgo de servicio, entendiendo que a través de estos estilos es posible alcanzar, por una parte, el desarrollo individual y al mismo tiempo desarrollar equipos eficientes y no solo colaboradores aislados.

Creemos que el liderazgo es la culminación del dominio de distintos desafíos, desde establecer vínculos de confianza con ejecutivos superiores, pares y redes; comprender las necesidades de los usuarios y otros implicados en los procesos; coordinar a proveedores y colaboradores; planificar y, más importante que todo, haberse formado para estar a la altura de los desafíos incluso cuando parece que son insuperables y debemos cuestionar nuestras propias decisiones.